viernes, 25 de abril de 2014

Si pudiera permanecer en las hamacas
-pertenecer a-

El sonido atroz de la nunca muerte de las ciudades.
A mi izquierda: la niña en el tobogán.

Al rededor: las publicidades.
A dentro: los juegos.

 

 Abrir sobres.

Pero,
¿cómo estar a la altura
de la nimiedad
de tu delirio más interesante?